Un espacio de viajes entre la música y palabras

Es que una vez más la música es la responsable

miércoles, 4 de enero de 2012

La eternidad de la obra maestra

Resulta que uno es un poco contestatario y abomina de las estructuras que le encorsetan sin aportar valor añadido, y el calendario, esa convención que da sentido a los planes contables, a las campañas comerciales y a poca cosa más, nos indica que estamos en momento de novedades, de estreno como quien dice. Y ante la imposición de lo nuevo, yo enfrento la atemporalidad de lo eterno, la sustancia de lo auténtico frente a la vacuidad de lo accidental. Hoy el cuerpo me pide hablar del mejor disco de toda la historia de la música, en muchas ocasiones he apuntado que todo lo que expreso en este blog son opiniones fácilmente rebatibles y que no pretenden otra cosa que mostrar, interesar o aportar. Este no es el caso de hoy, el Kind of blue (1959) de Miles Davis, no podía ser de otra manera, es el mejor disco de Jazz sin duda, pero es que es el mejor disco de todos los discos también sin dudarlo. No hay otra grabación a lo largo de la historia de la música que reúna tantas virtudes, tantos valores universales y tanto talento en explosión. Esta entrada no pretende demostrarlo, de eso ya se han encargado muchos críticos, expertos y melómanos cultos a lo largo de los últimos cincuenta años y con ello no pretendo decir que sea mi disco favorito, sabido es por los lectores de mi blog que el Jack Johnson me gusta más, pero sé que no es mejor.
... so what?
No conozco a nadie que no se haya dejado seducir por esa bestial entrada del So what que abre el álbum, se tenga la cultura musical que se tenga, se proceda del entorno que sea o se opine lo que se opine sobre el Jazz, si uno no es sordo y le gusta la música es el disco perfecto para ser una obra de cabecera.
El disco es perfecto porque es eterno, se puede escuchar en cualquier época de la vida, y sospecho que muerto tampoco debe molestar en absoluto; es perfecto porque no es coyuntural, se puede escuchar en cualquier situación en la que uno se encuentre; es perfecto porque es inagotable, se puede escuchar tantas veces seguidas como uno desee que jamás le cansará ni le sonará ni una nota prescindible, es perfecto porque es un disco conceptual en el mejor sentido del término, todos los temas beben de la misma fuente y al mismo horizonte suenan, es perfecto porque el nivel de los músicos que lo habitan es inmejorable, es el mejor momento de todos (con la excepción de Miles que es más perfecto) y a pesar de la enorme envergadura de los trabajos posteriores de Trane, Canonball o Evans, todos los músicos nunca han sonado tan excelsos, es perfecto porque es el mejor disco de iniciación al Jazz y el mejor para los iniciados, y es perfecto porque a pesar de ser un disco de Davis es el trabajo de creación grupal más hermoso y rotundo que se pueda escuchar. En resumen, es el disco y es perfecto.
Hace unos días, cuando ya barruntaba que me apetecía escribir esta entrada, entrada que a diferencia de la mayoría no tiene guión previo, se escribe tal cual la voy pensando, me comentó Félix ( http://jazzeseruido.blogspot.com/2007/04/kind-of-blue.html ) que su primera entrada la había dedicado a esta obra, cosa normal porque si uno tiene un excelente blog de Jazz hay pocas cosas más con las que se pueda uno lanzarse a la aventura de iniciarlo. Nuestras dos entradas son muy diferentes pero empiezan de la misma forma, reconociendo la extraordinaria categoría del disco, como no podía ser de otra manera. Para ver una muestra de la envergadura que tiene la difusión de este trabajo de un género minoritario como es el Jazz, hay que saber que Google arroja 36.900.000 enlaces al introducir su nombre, frente a los 35.000.000 del Thriller que como todo el mundo sabe es el disco más vendido de la historia (7 millones el Kind frente a los 160 millones del negro que quiso ser blanco), con ello se demuestra una vez más que el arte siempre vence al mercado, aunque sea a regañadientes y sin hacer demasiado ruido.
La historia de la grabación del Kind se resume en el título del primer corte, So What, esa era la respuesta que Davis daba a muchos comentarios admirativos, o menospreciativos, acerca de su música, y cuentan que cuando se presentó en el estudio con las partituras (según sus propias palabras: "No escribí la música del Kind of Blue, sino que aporté esquemas de lo que cada cual se suponía que tocaría, porque quería mucha espontaneidad en la interpretación, exactamente como pensaba que existía en la interacción entre aquellos bailarines y aquellos tambores y aquel finger piano del Ballet Africaine (1)", Bill Evans miró sus papeles y preguntó el nombre de la primera pieza, "So what" respondió Miles y se le quedó el nombre. Y qué!, así de echado para adelante era el genio. Un par de sesiones, sin ensayos y con los músicos en tensión absoluta ante una música totalmente suave, eso es todo, así se graba el mejor disco de la historia.
Para rebajar un poco la euforia retomamos de nuevo la vos de Miles respecto al Kind: "Cuando digo a la gente que no conseguí lo que me proponía con Kind of Blue, que fallé en mi intento de incorporar el sonido final al sonido exacto del finger piano africano, todos me miran como si estuviera loco. Me replican que aquel disco fue una obra maestra (a mí también me gustó), y piensan que simplemente que trato de tomarles el pelo. Pero soy sincero al afirmar que el sonido a que me refiero era lo que me propuse reproducir la mayor parte del álbum, especialmente en "All Blues" y "So What". Fallé, y basta.
Se me ocurren tres razones que justifican estas palabras:
La primera es que ese disco significa el fin de una de las mejores formaciones que tuvo el maestro y se grabó en plena desintegración. Miles sabía por otros que Trane quería volar solo y eso le entristeció doblemente, por la deserción y por la ocultación. Bill ya estaba fuera del grupo, Winton Kelly era su sustituto y es el piano de Freddie Freeloader porque Miles lo citó para las grabaciones por si Bill Evans no aparecía (afortunadamente sí lo hizo). La sensación que tenía Davis en aquella época le confiere un aspecto negativo al disco que no puede eludir cuando lo analiza.
La segunda es que es un disco que representa un callejón sin salida para la búsqueda permanente de Davis, no puede avanzar más en esa dirección y eso le provoca cierta frustración. Su siguiente trabajo es el Sketches of Spain (1959) y no sería uno de los grandes discos del genio, un rumbo que no recobraría hasta la invención del Fusion, pero eso es otra historia.
la trasera de la perfección
Y la tercera es que un sabio como él, sabía que la perfección no existe y que el interior del disco siempre tiene una distancia hacia el hálito que lo inspira, no es ya lo que comenta sobre el sonido africano, es que si uno es sincero no existe crítico más despiadado con sus obras. Él lo fue con todas porque su cabeza contenía toda la música y sus grabaciones no.
Esta es la cosa y la cosa es esta, pasen y acomódense, el viaje más hermoso no cesa.
(1) Miles se refiere a un espectáculo al que Frances, su esposa de entonces que era bailarina, le llevó a ver en la época en la que él estaba gestando el nacimiento del Jazz modal.

16 comentarios:

  1. Todo lo que dices es como una biblia. Podría ser obligatorio para todo el que quiera poner las manos y los oídos en un disco de Miles (o en uno de jazz).

    Gracias por la entrada (y por citarme). No sé las veces que habré regalado este disco, pero era como un deber.

    Un abrazo y feliz año.

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  2. Hola Félix,
    Gracias por tu comentario, tengo a Trane aullando su Psalm a todo trapo mientras los enanos se ponen un poco en marcha y en momentos como este uno se pregunta si existe algo en la vida que no pueda ser pintado por Jazz de esta envergadura (qué fino que es McCoy !!!).
    Yo lo que no sé es las veces seguidas que he tenido el Kind en modo repetición sin querer quitarlo.
    Un abrazo y que los Reyes les pinten a tus niñas (y a todos) la mejor de las sonrisas, los míos están cardiacos con la última espera

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  3. Kind of Blue es un disco al que siempre vuelvo, y me lo sé de memoria. Y lo tengo en 5 formatos diferentes: LP con la portada cambiada, LP con la portada original, CD de la "Denitive edition", CD doble del 50 aniversario, e incluido en la caja de todo lo que grabaron Miles y Trane para Columbia. Y sin embargo no es mi disco favorito de Miles, ese lugar lo ocupa "In a silent way". Sin dejar de reconocer todas su virtudes, no lo considero un disco esencial para empezar en el Jazz, porque bajo la aparente simplicidad subyace una importante complejidad. Yo siempre recomiendo como discos iniciáticos cualquiera de los 4 "gerundios" que grabó en el primer quinteto con 'Trane

    Por cierto, eso de que Sketches of Spain no es una obra enorme no me lo dices a la cara, jajaja.

    Un abrazo

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  4. Me ha encantado lo de "...y sospecho que muerto tampoco debe molestar en absoluto;"
    Genial.

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  5. Hola Mario,
    Te envidio las posesiones y coincido contigo, tal como comento en la entrada, que no es mi disco favorito del monstruo (Jack Johnson y en segundo lugar las Complete JJ sessions :-P) pero es todo lo que he escrito y mucho más. Los gerundios por supuesto que son sensacionales, el primer quinteto en estado puro con las cuatro grabaciones derivadas de dos sesiones estratosféricas ... pero no me compararás a Garland con Evans, y para mí esa es la guinda de tan maravillosa cocción. Sigo pensando que es el disco perfecto. Para iniciarse y para todo.
    Lo lamento pero creo que el SoS es un disco no mayor, llamarlo menor sería herejía.
    Un abrazo
    Por cierto estoy casi decidido a que este primer semestre que cerrará el primer año de mi blog va a ser semestre Coltrane, igual te pido ayuda para alguna época que tengo menos escuchada, ya te diré..

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  6. Hola Paz,
    Feliz año!!! El día que no me hagan mi funeral (soy donante de cuerpo) quiero que si me pongan música, y por supuesto el Kind me parece de lo mejora para no escuchar (porque los muertos, eso me han dicho, no escuchan pero tal vez sienten... :-) )
    Un abrazo

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  7. Con Hendrix y Lennon quizás sea la trilogía de oro. Todos los pianistas querían tocar con él, aunque tuvieran que cambiar el piano por el organo eléctrico , ya que les suponía subir de rango, los guitarristas , bajistas , baterías , etc, lo mismo. Dicen que Milles inventó el jazz eléctrico. Lo cierto es que los que tocaron con Milles están súper orgullosos, vi en un reportaje al gran Carlos Santana hablar de él como alguien único . Fueron 40 años editando discos y su vigencia es eterna. Saludos, Manuel

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  8. Hola Manuel,
    Bienvenido de nuevo. De tu trilogía admito con ciertas reservas a Hendrix, mi admiración por él es enorme pero su impacto musical es bastante limitado por la brevedad de su carrera. Del otro, tienes que saber que tengo cierta fobia por el Pop y el grupo de tu mencionado son la quintaesencia del Pop (intento no mencionarlos en el blog por una estúpida estrictez personal :-P)
    La jerarquía que Miles mantuvo siempre con casi todos los músicos fue extraordinaria y un resultado natural de su cualidad estratosférica como músico y maestro.
    Un saludo y espero contar con tus opiniones aunque no coincidamos a veces.

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  9. En lo de la trilogía hablaba como influencia en la música de los últimos años, no me gusta el pop y tampoco thriller, el country o románticos como Tony Bennett. Si me ha gustado mucho Stevie Wonder , hace poco vi en you Tube el video de 1 hora de Rio 2011 y me sigue gustando Lou Reed, siempre en la brecha. En fin que como Liverpooliano no paso. Coincidir es dificil cuando hay sinceridad, agradezco que cuentes conmigo, hasta otra Manuel

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  10. Rehola Manuel,
    Aclarado el concepto. En lo del Country tendríamos nuestras discrepancias, a mí hay cosas que sí me gustan bastante pero es reciente ya que durante años me daba repelús.
    Hasta otra compañero

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  11. Ferrán, te ofrezco mi ayuda en todo lo que quieras sobre Coltrane, que placer!!! Hoy me acaba de llegar otro libro sobre él, y ya tengo seis, y toda su discogafía oficial y bastante pirata, o se que tú abre la boca y tus deseos son ódenes. De entrada, re-escucha "Coltrane" (el de Impulse!, no el de Prestige). No sé cómo de olvidado lo tendrás, peo yo lo he estado re-escuchando esos días y es el disco que resume toda la segunda (o tercera) fase de su carrera. Es uno de mis favoritos.

    Un saludo

    Mario

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  12. Bien Mario,
    Me gusta tu entusiasmo y para que veas que a pesar de las "discrepancias" sobre el Sketches, mantenemos cierta sintonía, mi disco de cabecera de Trane es el A love supreme y le tengo un cariño inmenso al Blue train porque fue el primero que le escuché, el Coltrane del 62 es otra de mis referencias de él. Ya iré madurando el calendario del semestre y estamos en contacto.
    Un saludo

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  13. Genial la historia de la grabación. Evidentemente ese procedimiento esta reservado para genios atrevidos. Yo voy entrando en el Jazz pero aún hay piezas que me intranquilizan en exceso. Yo creo que el jazz y mi ritmo interior estan desincronizados. Es una sensación de desasiego difícil de explicar, es como bailar con alguien a ritmos diferentes, no acabas de disfrutar del baile. El título So what. Que más se puede decir. Yo ante tanta seguridad sólo puedo seguir escuchando a ver si me sincronizo con el maestro.

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  14. Hola MiMaría,
    Qué buena letra hace tu tableta ;-). Miles fue tan grande que sus modelos de grabación son muchos y míticos, para este, como tú dices, se ha de ser uno de los elegidos. Coltrane también grabó el Blue train en primeras tomas y hay una veracidad en esos discos que estremece sin cesar. La música de Jazz no me parece difícil pero sí que precisa de escuchas, cuando suena tiene que ser escuchada y habiendo sonado unas cuantas veces para que su fuerza te capture sin remedio.
    So what!!

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  15. Totalmente de acuerdo con la entrada Ferrán, es imposible no dejarse seducir por los primeros compases de So what. Desde luego uno de los mejores discos de jazz que jamás se han escrito...

    Yo lo escucho de muchas maneras y situaciones. Pero una de mis favoritas es mientras me dejo embaucar por alguna lectura sobre jazz... El poder de evocación no tiene límite...

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  16. Hola Manu,
    Es que esta entrada me la debía y era obligada. Si juntaramos todos los momentos en los que los amantes del Jazz hemos escuchado este disco, obtendríamos un bienestar cósmico de proporciones insuperables.
    Un abrazo

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